Evolución
La jirafa es originaria de África, con más de 50 millones de años y se cree que estas se introdujeron en Asia hace unos 15 millones de años. Aunque no hay muchos fósiles de las primeras, existe información suficiente para que los científicos puedan llegar a algunas teorías sobre su evolución, teniendo en cuenta que el fósil más antiguo que ha sido identificado es de aproximadamente 1,5 millones de años.
Durante tiempo se ha aceptado la teoría de que el cuello de las jirafas actuales evolucionó para que pudieran acceder a plantas más altas o para desarrollar un método especializado de lucha. Ya que a comienzos del siglo XIX, Lamarck, postuló la heredabilidad de los caracteres adquiridos, sosteniendo que las jirafas, en su afán por llegar a las hojas más altas, fueron alargando sus cuellos generación tras generación, generando un alargamiento que acabó por heredarse.
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